Guadalajara, Jalisco.- Con la llegada de Edison Flores a Atlas FC se abre una nueva posibilidad de encontrar un elemento que pueda llenar el número que a lo largo de la historia del fútbol ha sido sinónimo de técnica y carácter dentro y fuera del terreno de juego, el mítico dorsal 10. Los últimos años eso no ha sucedido dentro de las arcas del bicampeón por lo que a continuación se presenta un análisis de últimos 10 futbolistas que han intentado llenar ese hueco dentro de los Zorros.
Antes de la llegada del mediocampista peruano, hubo algunos elementos a los que les pesó en demasía o bien fueron intermitentes al tener la 10 a sus espaldas, habrá que remontarse en primer instancia al ya lejano Apertura 2010 donde los Rojinegros hacían oficial la llegada de Alfredo «Chango» Moreno (d.e.p.d) delantero en el cual la directiva depositaba sus esperanzas de encontrar un referente al frente, Moreno llegaba del Club América con estadísticas no tan buenas apareciendo en 14 partidos y anotando solamente 4 goles. En Atlas esperaban encontrar la legendaria versión del argentino cuando jugó para el desaparecido San Luis del cual aún ostenta la presea de máximo anotador con 54 tantos jugando de 2007 a 2012, en los dos torneos disputados en Guadalajara Moreno pisó la cancha 30 veces y anotó 11 dejando un agridulce sabor de boca para la Academia.
Para el Apertura 2012 se le dio nuevamente la batuta a un sudamericano para usar la décima camiseta del equipo, Atlas contrataba a Luis Bolaños un centrocampista ecuatoriano que en aquél entonces arribaba a Guadalajara con un mediano cartel desde Liga de Quito en la Serie A de Ecuador, equipo en el que de hecho tuvo sus mejores números, también era de conocimiento público que el oriundo de Quito tenía fallas en su disciplina; el ya ahora veterano jugador con 37 años disputó 10 encuentros con La Academia en los cuales jamás pudo encontrar el gol ni asistir. El rendimiento del apodado «Chucho» fue penoso y aunado a ello ya tenía tan molesta a la directiva de Atlas con sus actitudes de insubordinación donde no mostraba ganas de trabajar que terminó siendo enviado a la sub-20 y posterior a ello se le rescindió su contrato pasando sin pena ni gloria.
El Clausura 2013 estaba por iniciar y en los escritorios de El Briseño ya tenían contemplado a quien sería el nuevo dueño de la 10, en calidad de préstamo era anunciado el boliviano José Luis Chávez que era cedido por el Blooming de su país. Tras jugar sus primeros seis meses con los Zorros el entonces técnico de Atlas Tomás Boy (q.e.p.d) pidió su permanencia luego de saltar a la cancha una docena de veces anotando un gol y asistiendo otro más, llegando el equipo hasta cuartos de final por lo que el entrenador vio con buenos ojos que se comprara su carta, los de pantalón largo cumplieron el deseo de Boy adquiriendo a Chávez por 80 mil euros según el portal Transfermarkt. Hacia el Apertura 2013 el nacido en Santa Cruz hizo otra docena de apariciones, aunque esta vez sin aportar al ataque. El Clausura 2014 llegó y parecía que el boliviano seguiría siendo dueño de la posición pero una lesión en la Jornada 1 acabó con su participación y su travesía por México regresando a Bolivia.
Parecía que en Atlas se persistía en la idea de que un foráneo debía usar la 10 por lo que para el Clausura 2014 llegaba procedente del Palmeiras un joven delantero de 25 años que lucía un currículum desconocido para el balompié mexicano y se podría decir que hasta pobre para lo que llegó a hacer en Serie B antes de su arribo a Guadalajara, se trataba de Maikon Leite. Fueron dos torneos los que pudo lucir la del Rojinegro en los cuales jugó un total de 37 partidos entre Liga y Copa MX, anotó un total de 6 goles y asistió en 4, a pesar de no tener números estratosféricos fue muy querido por la afición de La Academia y se pedía su continuidad en el cuadro tapatío pero para la directiva no fue suficiente por lo que tuvo que regresar a su natal Brasil con Palmeiras; la afición recriminó en más de una ocasión que no se hiciese un esfuerzo por mantenerlo.
El hartazgo de no poder encontrar a un 10 referente, orilló a los mandamás de Atlas a recurrir a un viejo conocido, a alguien hecho en casa, quien fuese uno de aquellos 11 jugadores que habían saltado al terreno de juego para entonces la última final de liga de los Zorros, Juan Pablo Rodríguez fue el elegido de enderezar el rumbo. Fue en el Clausura 2015 que La Academia anunciaba el fichaje a préstamo de «El Chato», el mediocampista venía de Santos Laguna pero ya con un delito grave para la gente Rojinegra, haber jugado para Chivas; entre las dudas por el pasado con el enemigo número uno y por la edad Rodríguez jugaría sus últimos seis meses portando la roja y negra con un balance de 19 partidos entre Liga y Copa Libertadores entre los que pudo generar la pobre cantidad de 1 gol y 2 asistencias aunque llegando inclusive a cuartos de final en liga. Al culminar su participación, regresó a Santos para jugar tres años más antes de colgar los botines.
La idea de tener a un extranjero como el 10 regresaba y para el Clausura 2016 Atlas anunciaba la incorporación del colombiano Jefferson Duque quien llegaba desde Atlético Nacional, «La Fiera» disputó 24 encuentros combinando Liga y Copa MX dentro de los cuales perforó 6 veces el arco, técnicamente esa fue su etapa como 10 del Rojinegro ya que Duque sumaría más a sus estadísticas en el club en otra etapa dentro de la cual ya no tuvo ese dorsal.
Para el Apertura 2016 Jahir Barraza regresaba de préstamo haciendo historia con Necaxa al regresar al equipo de Aguascalientes a Primera División tras 5 años en el Ascenso y se le dio la responsabilidad nuevamente a un canterano de usar la 10. Fueron tres torneos en los que el nacido en Chihuahua logro tener un balance de 31 apariciones en Liga y Copa MX de los que pudo sacar la incipida cantidad de 6 goles, números preocupantes para un delantero. Saldría de Atlas nuevamente para ir cedido a San Luis y así tener una época de préstamos donde inclusive llegó al futbol europeo hasta 2019 donde terminó su relación laboral con Atlas.
La directiva de los Rojinegros pensaba en hacer las cosas diferentes para el Clausura 2017 por lo que anunciaba la llegada del segundo futbolista ghanés en la historia del fútbol mexicano, Clifford Aboagye de entonces 22 años fichaba por el Atlas y obtenía la camsieta 10 procedente del Granada B de España en calidad de préstamo. Todo indicaba que sería un fichaje positivo puesto que el mediocampista africano tendría cierta facilidad con el idioma y venía de aprender importantes cosas en tierras ibéricas; Aboagye se mantuvo en Guadalajara durante dos años y medio donde sumó 71 partidos, 6 goles y 3 asistencias. Durante ese proceso Atlas compró su carta con valor de 1 millón de euros según Transfermarkt y finalmente dejaría de ser Zorro después de ser prestado a Querétaro y finalmente Tijuana le compraría pasando al igual que muchos otros sin pena ni gloria.
Hacia el Clausura 2019 la Academia anunciaba la incorporación del veterano mediocampista paraguayo Osvaldo Martínez que venía de hacer historia en América y posteriormente Santos club con el cual no renovaría y llegaría libre a Atlas donde le otorgaron la 10. Se mantuvo durante un año como Zorro y durante esos dos torneos sumó la cantidad de 41 encuentros, 9 anotaciones y 7 asistencias además de ganarse el cariño del público tapatío. Por cuestiones contractuales y quizá también por edad su historia en la Madriguera culminó saliendo en calidad de agente libre a Puebla.
La confianza de darle la 10 a un sudamericano se avivaba de nueva cuenta y procedente del D.C United Luciano Acosta era presentado como refuerzo de cara al Clausura 2020, de entre la suspensión por la pandemia de COVID-19 y otras situaciones el volante argentino jugaría un total de 33 partidos, perforó el arco en 3 ocasiones y asistió en un par. Fue para la mitad del Clausura 2021 donde más nivel se le comenzaba a notar y el equipo empezaba a necesitarle pero una oferta para regresar a la MLS tentó a ambas partes por lo que salió en marzo de 2021 al FC Cincinnati en una operación tasada en poco más de 2.5 millones de euros según Transfermarkt.
Un argentino seguiría haciendo uso de la 10 cuando Atlas presentó a Gonzálo Maroni que llegaba procedente de Boca Juniors para el Apertura 2021, la expectativa se acrecentaba entre la afición pues el cordobés venía de tener una experiencia con La Sampdoria de Italia. A Maroni le tocó ser de la plantilla histórica que le devolvió la gloria a las vitrinas de La Academia pero de forma increíble no rindió para nada como se esperaba participando en el periodo de dos torneos en 10 partidos sin anotar o asistir. Para el final del Clausura 2022 tras el bicampeonato regresó a Boca Juniors y estos a su vez le enviaron a San Lorenzo.
Edison Flores tiene una gran responsabilidad de frente, los jugadores han pasado y solo unos pocos han logrado lucir medianamente o por lo menos se han ganado el cariño de la gente. Atlas va sí o sí en búsqueda de un cuarto título y un legendario tricampeonato por lo que portar la camiseta 10 no será cosa fácil para el seleccionado peruano. Conoce el fútbol mexicano pero viene de una liga que aún no está al nivel de la Liga MX, no ha podido emular sus mejores números como lo hizo en Perú con el Universitario de Deportes y el extinto Monarcas Morelia además de que una lesión lo mermó los últimos meses perdiendo oportunidad en Washington y recibiendo crítica tras crítica. Atlas y la Liga MX esperan revivir lo que un día fue el apodado «Orejas».
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